
La casta sacerdotal inicialmente era íntegramente femenina,
como tales su trabajo era el de ser nexo entre el hombre y la Diosa Madre, a
quien se honraba y pedía por el éxito de las cosechas y la fertilidad en
general.
Las sacerdotisas eran mujeres devotas y muy letradas por lo que la impresión
de castidad, sabiduría y conocimientos esta bien dada. Sin embargo a medida que
paso el tiempo esta imagen se vio afectada por el cambio que sufrió la Diosa
Madre, que siendo antes una única divinidad femenina, evoluciono para
convertirse en innumerables y duales
representaciones de si misma, dividida en diferentes panteones, dioses y
diosas.
Para este momento la antes mencionada castidad, según practicas
y creencias religiosas, se convierte en ’prostitución sagrada’, es aquí donde
la imagen sacra y asexuada de la sacerdotisa se ve convertida en una imagen sexualmente
poderosa, que encontró la divinidad en su cuerpo y le rinde culto sin culpas.
Un ejemplo de