El obsequio de los Enamorados

La carta de los Enamorados fue representada de muchas maneras a lo largo de la historia y evolución del tarot. Sin embargo, más allá de su nombre, el amor romántico no es el punto focal de este arcano. Si  nos posicionamos como observadores del tarot de Marsella, aquí veremos cuatro personas; ‘El enamorado’, Cupido, y dos mujeres en lados opuestos, también aparentemente opuestas entre sí.

Mas tarde, en Rider Waite nos encontramos con una imagen aparentemente diferente pero a la vez, significativamente similar en cuanto a la esencia que representa la carta; cuyo nombre cambio a ‘los Enamorados’. Aquí encontramos, no un hombre y dos mujeres, sino una pareja de enamorados en el Jardín del Eden. Son Adán y Eva, con dos árboles detrás de cada personaje, uno, el Árbol de la Vida y el segundo el Árbol del Conocimiento. Por encima de ellos, remplazando la imagen de Cupido (Dios del amor erótico) se encuentra un Angel de Dios.

El Obsequio del Hierofante (Papa)

En la carta se ve al Papa rodeado de lujos a la puerta de la iglesia (en este caso la representación de los pilares hace referencia a la Iglesia como estructura religiosa, a diferencia de la carta de la Sacerdotisa, donde las columnas representan el templo interno), entronado y enaltecido con dos suplicantes a sus pies. Era la representación de la santidad y la divinidad y los suplicantes podrían aspirar a alcanzar una milésima parte de su divina altura, adorándolo.

Sin embargo, mas adelante la figura y concepto de Papa, se mostró limitado para lo que en realidad el arquetipo viene a representar, y fue llamado Hierofante o Sumo Sacerdote(Tomando este título de la antigua Grecia de la religión de los Misterios Eleusinos). A diferencia del Papa, el Hierofante no se considera divino o santo, sino un medio para alcanzar la santidad o divinidad. El trabajo del Hierofante era el de educar e instruir en los misterios religiosos para ayudar a las personas a vivir sus vidas en este mundo, según los mandatos divinos.

El obsequio del Emperador

El Emperador es amo y señor de todo; y como tal ha de velar por el bienestar de sus súbditos y de su contra-parte la Emperatriz. Cada decisión que tome,  por pequeña e insignificante que parezca cualquier cosa que decida, afectará a todos desde él hacia abajo. Entonces el Emperador lleva una gran carga que comparte con su consorte. Donde ella es quien cuidará del bienestar y seguridad emocional de sus ‘hijos’ como una madre, él habrá de proveer protección, estabilidad y seguridad material como un padre.

Con la marca de Aries, suele ser bastante impulsivo y confiado, muy seguro de sus elecciones pero, acaso no debe serlo un Emperador? Qué clase de regente sería si denotara dudas de si mismo, como inspirar confianza en los demás.

Como regente también ha de proveernos de seguridad propiamente dicha, lo cual a lo largo de la historia ha demostrado que El emperador, debe ser además valiente y versado en el arte de la guerra. Pues como proteger su imperio del ataque de otros, si no sabe como dirigir a sus tropas.

Como vemos, este arcano parece tener más obligaciones que libertades, sin embargo no seria Emperador si no las tuviera. Así como hace de su palabra la ley, para eso deberá haber ganado el respeto y apoyo de los suyos, mostrándose digno del imperio así como de su compañera, cumpliendo con las anteriormente mencionadas condiciones.